El uso educativo de las TIC ha puesto de manifiesto en esta última década una serie de situaciones paradójicas:

1. Aprender sobre la tecnología en lugar de aprender con la tecnología. Al principio se hacía especial hincapié en conocer la máquina y dominar básicamente su funcionamiento. Es lo que llamó “alfabetización digital”.  Con el tiempo se comprobó que estos conocimientos son útiles en las primeras fases del aprendizaje pero posteriormente deben dejar paso a otros más genuinamente educativos.
2. Multimedias basados en la filosofía del refuerzo. Desde las instituciones existe una preocupación por disponer de programas multimedia para descubrir o reforzar todos los contenidos curriculares del programa general. Esto no se ha conseguido a pesar de grandes esfuerzos pero tampoco es algo tan necesario. Un análisis más detallado de su uso enseguida ponen de manifiesto que enfatizan un enfoque conductista del aprendizaje. No permiten que el alumno implique la creatividad y la construcción de conocimientos porque sólo se solicita elegir una opción entre varias.
3.Importancia del contexto. Con el tiempo se ha descubierto que el éxito educativo del uso de una aplicación informática no depende tanto de cómo está diseñada si no sobre todo de la preparación y gestión del contexto educativo en que se utiliza. Por eso se pueden conseguir resultados interesantes con programas muy modestos y resultados mediocres con aplicaciones muy elaboradas y costosas. El papel del docente como organizador y facilitador de entornos se ha revelado de gran importancia.
4.Motivación del alumnado. Desde un principio se ha sostenido que el alumno que usa tecnología es un alumno motivado. Esta afirmación que al principio puede ser cierta, no lo es tanto a medida que el alumno va teniendo experiencia con los medios tecnológicos. Con el tiempo se convierte en un usuario exigente por lo que ciertos usos pueden resultarle aburridos y no demasiado motivantes. Por otra parte el éxito del uso de un programa no puede basarse sólo en lo lúdico porque lo pedagógico es lo importante y fundamental de nuestra tarea. Ni tampoco puede basarse en la facilidad porque no podemos renunciar al principio de exigencia.
5.Formato digital frente al formato impreso. En muchos casos se plantea el uso del ordenador para realizar tareas donde lo fundamental es “pasar página”.  Se utiliza la tecnología como antes se hacía con el libro, es decir, para enseñar pero no tanto para aprender. El uso del libro es más fácil e inmediato. Por el contrario el uso de las TIC supone invertir tiempo y esfuerzo hasta situar al alumno frente al programa oportuno. Por este motivo es necesario plantearse si el uso que se hace de las TIC supera en calidad y beneficios al uso del formato impreso. De no ser así estaríamos invirtiendo en tecnología pero sin un elevado aprovechamiento. Dicho de otra forma: si se puede hacer de la misma forma con papel, quizás interese hacerlo mejor con papel.
6.Tareas fundamentales frente a tareas complementarias. A menudo se han utilizado programas para realizar tareas que refuerzan los aprendizajes de conocimientos ya tratados anteriormente por métodos tradicionales. Pocas veces para descubrir o trabajar nuevos contenidos.
7.Importancia del proceso frente al resultado. En otras ocasiones el uso de ciertas herramientas ofimáticas se ha legitimizado porque permitían potenciar y mejorar un trabajo académicamente valorado. Es el caso de trabajos realizados con el procesador de textos, programas gráficos, etc. Se pone más énfasis en el resultado final que en lo que ocurre durante el proceso de elaboración y creaciór.
8.Conflicto de competencias alumno-ordenador. A estas alturas todavía hay quien se empeña a pedir a sus alumnos que memoricen datos cuando eso es lo que mejor hace un ordenador y a los programas de ordenador que sean capaces de tomar decisiones a partir de complejos análisis de las respuestas del alumnado cuando eso es lo que mejor hace un alumno o un profesor. Quizás falte una reflexión de qué es lo importante en cada caso.
Estas situaciones invitan a reflexionar y plantearse como modelo un aprendizaje con las siguientes características: activo, constructivo, autoregulado y tecnológico. Frente a la simple reproducción se plantea estimular la investigación, la creatividad y la construcción del conocimiento. En ese contexto el medio tecnológico se valora en la medida que facilite y potencie las distintas capacidades el pensamiento: descubrir, analizar, anticipar, diferenciar, clasificar, reinventar,  comparar, relacionar, distinguir, sintetizar,… Es decir: pensar y tomar decisiones.

3 comentarios en «Paradojas de la enseñanza con las TIC»
  1. Permitidnos felicitaros por este blog y, en general, por el uso pedagógico que hacéis de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).

    Nos gustaría invitaros a participar en el Certamen Internacional EducaRed, que pretende facilitar a la comunidad educativa nuevas herramientas, conocimientos y métodos de trabajo para asumir los cambios que las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) provocan en nuestra sociedad y en las nuevas generaciones de estudiantes, así como en los métodos de enseñanza y aprendizaje.

    Tenéis toda la información en nuestra web: http://www.educared.org/certameninternacional

    También os invitamos a ver el vídeo promocional de esta edición en: http://www.youtube.com/watch?v=GGikEyxxrHc

    Podéis participar en el Certamen creando blogs, webs y wikis. Además, los docentes pueden participar en solitario, con Experiencias Didácticas relacionadas con el uso de las TIC.

    El plazo de inscripción finaliza el 16 de abril. Si tenéis alguna duda, poneos en contacto con la Oficina del Certamen.

    Un cordial saludo,

    Oficina del Certamen Internacional EducaRed
    Correo electrónico: certamen@educared.org
    Teléfono: 902.905.144
    +34.981.975.621

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